“Me han dicho que la línea del horizonte está más cerca o más lejos según me encuentre en una llanura o en un lugar alto. Desearía, para los niños pequeños, que ascendieran lo más alto posible para ver lo más lejos posible. Que puedan dirigirlos por tantos caminos, y entre tantos setos altos, que lleguen a la edad adulta con sólo una sensación de botas polvorientas. Debe haber una elevación del punto de vista antes de que lleguemos a una elevación de carácter, y con sinceridad suplico que se les permita dar una buena mirada a su alrededor. Quisiera pedir que se reflexionaran las palabras de John Richard Green: «La geografía es el punto de partida natural para todas las asignaturas de formación futura». Rev. F. R. Burrows, M.A. Revista Revisión de los padres. Volumen 7, 1896, págs. 340-347
Empiezo a profundizar en una de las asignaturas correspondientes al conocimiento del universo: Geografía, y mientras me familiarizo con ella, me es posible ver con más claridad cómo las prácticas educativas de la filosofía CM están conectadas entre ellas. También me llena de expectativa ir implementado en más detalle cada sugerencia que la Srta. Mason y sus maestros propusieron y prácticaban en sus escuelas.

En esta primera publicación estaré compartiendo cómo el área de geografía empieza a tomar presencia en los primeros años de nuestros pequeños, especialmente a partir de los seis años hasta los nueve, coincidiendo aproximadamente con los grados correspondientes al Grupo I (en inglés Form I)
Como el resto de prácticas educativas, la Señorita Mason nos sugiere unos principios generales para la enseñanza de esta asignatura:
«Comencemos a ver los lineamientos que debemos seguir en la enseñanza de la geografía: para fines educativos, el niño debe aprender cierta geografía, y de una manera, que su mente se almacene con ideas y su imaginación con imágenes; para efectos prácticos, debe aprender geografía sólo en la medida en que, considerando la naturaleza de su mente, sea capaz de recordar; en otras palabras, debe aprender lo que le interesa. Lo educativo y lo práctico van de la mano, y la lección de geografía se convierte en la ocupación más encantadora del día del niño»
Volumen 1. Página 273
En base a esta sugerencia la Srta. Janeth Smith en la Revista de los padres de 1913[1] destaca tres principios y añade:
«De lo anterior podemos identificar que los dos principios son:
- — Que la mente debe nutrirse de ideas vivas.
- — Que la imaginación debe estar provista de imágenes.
A estos podemos agregar un tercero:
- — Que la geografía debe ir siempre asociada a la experiencia.
Para llevar a cabo nuestro primer principio, debemos procurar que el niño tenga los mejores y más interesantes libros que se puedan conseguir sobre el tema . Para que podamos realizar nuestro segundo principio, debemos recurrir a sus poderes de imaginación mediante imágenes e historias, y un estudio inteligente del mapa, de modo que no olvide lo que ha escuchado, sino que se mantenga un vivo interés en el lugar bajo consideración. Y para el tercero, debemos procurar que tenga cierta experiencia como geógrafo por su propia cuenta, por elemental que sea esa experiencia.» [*enfasis de mi parte]
Pero, ¿cómo empezar?
«Pero, ¿cómo empezar? En primer lugar, el niño adquiere sus nociones rudimentarias de geografía como adquiere sus primeras nociones de ciencias naturales, en esas largas horas al aire libre cuya importancia ya hemos visto. Un estanque que se ha formado por una simple hendidura en los campos explicará la naturaleza de un lago, llevará al niño a los hermosos lagos de los Alpes, al gran lago africano de Livingstone, en el que se deleitó al ver a sus hijos remando- «sus propios hijos «remando» en su propio lago…»
Volumen 1. Página 273.
Las primeras nociones de geografía se trasmiten inicialmente en los primeros años no formales, en ese ambiente natural y orgánico; de esta manera las primeras nociones de geografía física se conjugan con el área de ciencias naturales, pues, es en este mismo espacio que la madre toma ventaja de las caminatas y el tiempo al aire libre para instruir en las formas de la tierra y cuerpos de agua, tomando como ejemplo lo local y visible para el niño. Poco a poco se va entrando a los años formales para continuar abordando conceptos más complejos relacionados con la dirección y los movimientos del sol, los planos, etc. Leamos ahora un poco sobre las sugerencias de la Srta. Mason a las que nos remite en el pasaje anterior ubicadas en la Parte II del mismo volumen.
Geografía al aire libre
«Geografía gráfica. —Pero la madre, que sabe más, encontrará cientos de oportunidades para enseñar geografía: un estanque de patos es un lago o un mar interior; cualquier arroyo servirá para ilustrar los grandes ríos del mundo; un montículo se convierte en una montaña, un sistema alpino; un avellano sugiere los poderosos bosques del Amazonas; un pantano, los arrozales de China; un prado, las praderas ilimitadas de Occidente; las hermosas flores de color púrpura de la malva común es una oportunidad perfecta para referirse a los campos de algodón de los estados del sur: de hecho, todo el campo de los mapas de geografía gráfica puede esperar hasta que se cubra de esta manera.»
Aquí podemos destacar el principio educativo que prevalece en los primeros años: tomar provecho de las cosas reales y del ambiente natural, así como de la experiencia, pero estos conceptos no son aislados sino que también los encuentran en los libros vivos sobre otras culturas, sus climas, sus espacios geográficos, su gente, etc. En sus escuelas se leían aproximadamente de 40-50 páginas por trimestre del libro de elección. En la pág. 277 del mismo volumen amplía:
«Las primeras ideas de geografía, las lecciones sobre el lugar, deben hacer que un niño observe la geografía local, las características de su propio vecindario, sus alturas y huecos, y las tierras planas, sus arroyos y estanques, deben adquirirse, como hemos dicho, vistos, al aire libre, y debe prepararlo para una cierta cantidad de generalización, es decir, debe poder descubrir definiciones de río, isla, lago, etc., y debe hacerlas por sí mismo en una bandeja de arena o dibujarlos en la pizarra.»
Los niños simulan fácilmente el conocimiento, y en este punto el maestro deberá tener cuidado de que nada de lo que reciba el niño sea mera palabrería, sino que toda generalización se resuelva de alguna manera así: –– El niño observa un hecho, como, por ejemplo, una amplia franja de terreno llano; el maestro amplifica. Lee en su libro sobre las Pampas, los países llanos del noroeste de Europa, la Holanda de nuestra propia costa oriental y, poco a poco, lo está preparado para la recepción de la idea de una llanura y mostrarla en su bandeja de arena.
De esta manera, en toda esa sección del primer volumen la Srta. Mason explica qué otros conceptos se pueden abordar tomando provecho de estos espacios:
«La posición del sol. —Y no solo esto: a los niños se les debe enseñar a observar de tiempo en tiempo la posición del sol en los cielos y, por su posición, a decir la hora del día. Por supuesto, querrán saber por qué el sol es un viajero incansable que trae consigo una historia maravillosa, con la que también pueden aprender en la “era de la fe” los tamaños relativos del sol y la tierra, su naturaleza y sus movimientos». En la misma Revista de los padres, la Srta. Janeth Smith sugiere: «Una buena forma de mostrar el cambio de posición de la tierra con respecto al sol es fijar un poste o palo largo en el suelo en algún lugar conveniente. Luego deje que los niños salgan a las 9, 12 y 3 en punto y que noten las diferentes direcciones de la sombra proyectada y sus diferentes longitudes. Déjalos marcar a lo largo de la sombra con un pincel y comparar. Entonces notarán cómo la sombra se encuentra siempre en la misma dirección a la misma hora aunque sea más larga o más corta según la época del año»
«Nubes, lluvia, nieve y granizo. —Las nubes y la lluvia, la nieve y el granizo, los vientos y los vapores, cumpliendo Su palabra, son todos los misterios cotidianos que la madre deberá explicar fielmente, aunque sea de manera simple. Hay ciertas ideas que los niños deben obtener dentro de un radio de caminata de su propio hogar si alguna vez quieren tener una comprensión real de los mapas y de los términos geográficos.
La distancia es uno de esos [términos geográficos], y la primera idea de la distancia debe abordarse por medio de lo que los niños considerarían una actividad agradable. Un niño camina a su ritmo habitual; alguien mide y le dice la longitud de su paso, y él mide los pasos de sus hermanos y hermanas. Luego, tal caminata, tal distancia, aquí y allá, se camina solemnemente, y una pequeña suma sigue—tantas pulgadas o pies cubiertos por cada paso, equivale a tantas yardas en toda la distancia. Varias distancias cortas alrededor del hogar del niño deben medirse de esta manera; y cuando la idea de cubrir la distancia está completamente establecida, debe introducirse la idea del tiempo como un medio de medición. Se debe anotar el tiempo necesario para caminar cien yardas. Después de descubrir que se necesitan dos minutos para caminar cien yardas, los niños podrán dar el siguiente paso —de que, si han caminado durante treinta minutos, la caminata debería medir mil quinientas yardas; en treinta y cinco minutos habrían caminado una milla, o más bien mil setecientos cincuenta yardas, y luego podrían agregar las diez yardas más que harían una milla. Cuanto más largas son las piernas, más largo es el paso, y la mayoría de las personas adultas pueden caminar una milla en veinte minutos.
Dirección. —Para cuando se hayan familiarizado un poco con la idea de distancia, se debe introducir la de dirección. El primer paso es hacer que los niños observen el progreso del sol. El niño que observa el sol durante un año y anota por sí mismo, o dicta los tiempos de su salida y puesta durante la mayor parte del año, y los puntos de su salida y puesta, habrán asegurado una buena base para lidiar con ese conocimiento definido. Dicha observación debería mostrar el reflejo de la luz del sol, la luz del atardecer reflejada por las ventanas del este, la luz de la mañana por las ventanas del oeste; la longitud y la intensidad variables de las sombras, la causa de las sombras, que puede aprender por medio de la sombra proyectada por una figura entre un toldo y una vela. También debe asociar las horas calurosas del día con el sol en lo alto, y las horas frescas de la mañana y la tarde con sol bajo; y debe recordarse que, si se para justo frente al fuego, siente el calor más que si estuviera en un rincón de la habitación. Cuando está preparado por una pequeña observación del curso del sol, está listo para tomar la idea de la dirección, que depende completamente del sol.
Este y oeste. —Por supuesto, las dos primeras ideas son que el sol sale por el este y se pone por el oeste; a partir de este hecho, podrá determinar la dirección en la que se encuentran los lugares cercanos a su hogar o las calles de su propio pueblo. Dígale que se pare para que su mano derecha esté hacia el este, donde sale el sol, y su izquierda hacia el oeste, donde se pone el sol. Luego mira hacia el norte y su espalda está hacia el sur. Todas las casas, calles y pueblos a su derecha están al este de él, los de la izquierda están al oeste. Los lugares que debe caminar hacia adelante para llegar están al norte de él, y los lugares detrás de él están al sur. Si se encuentra en un lugar nuevo para él donde nunca ha visto salir o ponerse el sol y quiere saber en qué dirección corre un determinado camino, debe notar en qué dirección cae su propia sombra a las doce en punto, porque al mediodía Las sombras de todos los objetos caen hacia el norte. Entonces, si se enfrenta al norte, tiene, como antes, el sur detrás de él, el este a su mano derecha, el oeste a su izquierda; o si se enfrenta al sol al mediodía, se enfrenta al sur.
Practicar cómo encontrar una dirección. —Esto causará gran interés en él sobre los nombres de nuestros grandes ferrocarriles. Un niño puede estar listo para notar las direcciones de los lugares con un poco de práctica. Permítale ver cómo cada una de las ventanas de su salón de clase están ubicadas, o las ventanas de cada una de las habitaciones de su hogar; las hileras de casas que pasa en sus paseos, y cuáles son los lados norte, sur, este y oeste de las iglesias que conoce. Pronto estará preparado para notar la dirección del viento al notar el humo de las chimeneas, el movimiento de las ramas, el maíz, la hierba, etc. Si sopla el viento del norte, tendremos nieve. Si sopla un viento del oeste, esperamos lluvia. Se debe tener cuidado en este punto para dejarle claro al niño que el viento lleva el nombre de la dirección de donde proviene, y no desde el punto en que sopla hacia él, ya que es inglés porque nació en Inglaterra, y no francés porque él va a Francia. Las ideas de distancia y dirección ahora se pueden combinar. Tal edificio está a doscientos metros al este de la puerta, tal pueblo a dos millas al oeste. Pronto se encontrará con la dificultad de que un lugar no es exactamente este u oeste, norte o sur. Es bueno dejarle dar, de forma indirecta, la dirección de los lugares como—«más al este que al oeste», «muy cerca del este, pero no del todo», «a medio camino entre el este y el oeste». Él valorará aún más los medios exactos de expresión por haber sentido la necesidad de ellos.
Más tarde, debería presentarle las maravillas de la brújula del marinero, debería tener su propia pequeña brújula de bolsillo, y debería observar los cuatro puntos cardinales y todos los demás puntos. Estos le proporcionarán los nombres de las direcciones que le ha resultado difícil describir.
Ejercicios de brújula. —Entonces debería hacer ciertos ejercicios de brújula de esta manera: dígale que sostenga la N de la brújula hacia el norte. «Luego, con la brújula en la mano, gira hacia el este, y verás algo notable. La pequeña aguja también se mueve, pero se mueve sola en la otra dirección. Gira hacia el oeste, y nuevamente la aguja se mueve en la dirección opuesta a la que te mueves. Sin embargo, giras solo un poco, y la pequeña aguja sigue tu movimiento. Y lo miras, preguntándote cómo la pequeña cosa podría percibir que te habías movido, cuando apenas lo sabía usted mismo. Camina derecho en cualquier dirección, y la aguja es bastante estable; solo bastante estable, porque está seguro, sin pretenderlo, de moverse un poco hacia la derecha o hacia la izquierda. Gira muy lentamente, un poco a la vez, comenzando en el norte y girando hacia el este, y puedes hacer que la aguja también se mueva en círculo. Se mueve en la dirección opuesta a ti, ya que está tratando de regresar al norte desde el cual estás girando».
Límites. —Una vez que los niños tengan la idea de la dirección, será bastante fácil introducir la idea de los límites de tal y tal campo de nabos, por ejemplo, está delimitado por la carretera en el sur, por una cosecha de trigo en el sureste, un seto en el noreste, y así sucesivamente; los niños obtienen gradualmente la idea de que los límites de un espacio dado son simplemente lo que toca en cada lado. Por lo tanto, un cultivo puede tocar a otro sin ninguna línea divisoria y, por lo tanto, un cultivo limita al otro. Es bueno que los niños tengan nociones claras sobre este tema o, más adelante, estarán confundidos cuando se enteren de que tal condado «limita» con tal y tal. En relación con los espacios delimitados, ya sean aldeas, pueblos, estanques, campos o no, los niños deben ser advertidos de los diversos cultivos que se encuentran en el distrito, por qué son pastos y por qué son campos de maíz, qué tipo de rocas aparecen, y cuántos tipos de árboles crecen en el vecindario. Para cada campo u otro espacio que se examine, deben dibujar un plano sencillo en la arena, dando la forma más o menos y escribiendo las direcciones como N, S, W, etc.
Las primeras nociones de mapa o cartografía, empiezan primero conociendo el concepto y el uso de estos en el ambiente real y con ejercicios mecánicos que le traigan deleite y descubrimiento.
Planos. —Poco a poco, cuando hayan aprendido a dibujar planos en interiores, ocasionalmente recorrerán la longitud de un campo y dibujarán su plano según la escala, permitiendo una pulgada para cinco o diez yardas. Los planos del jardín, establos, casa, etc., podrían seguir.
Geografía local. —Es probable que el vecindario de un niño le dé la oportunidad de aprender el significado de colina y valle, estanque y arroyo, cuenca, la corriente, lecho, bancos, afluentes de un arroyo, las posiciones relativas de pueblos y ciudades; y toda esta geografía local debe poder imaginarse aproximadamente en un plano hecho con tiza sobre una roca, o con un bastón en la grava, percibiendo las distancias y situaciones relativas de los lugares que rodea.»
Todos estos conceptos de geografía física empiezan en los años informales y se continuan abordando de la misma forma en los siguientes tres primeros años formales.
Libros de apoyo

Geografía Elemental (Elementary Geography) es la traducción en español de uno de los libros de apoyo que usaban en las escuelas de Charlotte Mason para abordar todas las sugerencias descritas anteriormente; este es el primer volumen de la serie The Ambleside Geography Books usados a lo largo de los diferentes grados. Disponible en formato kindle aquí. Este primer volumen para referencia principal del maestro se abordaba en los primeros tres años de sus escuelas así:
- Primeras 45 páginas repartidas durante todo el año 1
- Continuaba el año 2 con las páginas 46 a la 87.
- Nuevamente repartidas durante el año 3, desde la página 88 a la página 128.
Nota: No es necesario leer todas las lecciones al estudiante, más bien, son de referencia principal para el maestro.
A partir del Año 2, se iniciaba el recorrido del segundo volumen de la serie, que solo se encuentra en inglés y que por supuesto mucha información ha cambiado a lo largo de los años, sin embargo, la idea general de la secuencia por cada libro de la serie va de lo general a lo particular, de acuerdo a las observaciones de Dawn Tull [2]: «cada libro consideraba todo un continente antes de concentrarse en sus paises individuales o regiones más pequeñas.» De esta manera comenzaban con la visión general del globo, sus características y sus divisiones generales, para luego pasar al estudio detallado del continente y nación de residencia, sus estados/subregiones correspondientes y luego así con el resto de los continentes. Todo esto a lo largo de cada grado académico del estudiante. Me adelanto hacia los siguientes años para tener una visión general de las temáticas teniendo en cuenta el resto de los libros de la serie:
Libro de apoyo | Temas | Año Aprox. |
---|---|---|
Libro 1 «Elementary Geography» | Geografía física elemental | Año 1-3 |
Libro 2 «The British Empire and the Great Divisions of the Globe« | Una visión amplia del mundo entero, y se inicia con el continente de residencia de los estudiantes | Año 2-3 |
Libro 3 «The Counties of England« | Geografía de su propio país, región por región. | Año 4-6 |
Libro 4 «Europe« | Geografía de su propio continente, país por país | Año 7-9 |
Libro 5 «Asia, Africa, America, and Australasia« | Resto de continentes | Año 10-12 |
Geografía y libros vivos
En la quinta parte del primer volumen, la Srta. Mason comparte:
«No es necesario que aprenda en esta etapa lo que se llama la ‘geografía’ de los países de Europa, los continentes del mundo – en su mayor parte, meras cadenas de nombres: puede que los aprenda, pero es bastante seguro que no los recordará. Pero sí es necesario, que dentro de su hogar pueda sentirse en cualquier región; que vea, con el ojo de su imaginación, a la gente en su trabajo y en sus aficiones, las flores y frutos en sus estaciones, las bestias, cada una en su hábitat; y que lo vea todo con simpatía, es decir, que siga las aventuras de un viajero; y de esta manera sabe más, está mejor dotado de ideas que si hubiera aprendido todos los nombres de todos los mapas. […]Puede que sea necesario dejar de lado muchas cosas, pero cada anécdota ilustrativa, cada detalle de descripción, tiene mucho que ver con la educación del niño. Aquí, como en otros lugares, la pregunta no es cuántas cosas sabe, sino cuánto sabe sobre cada una de ellas.
Qué conocimiento general debería tener un niño de nueve años .–– Suponiendo que entre el sexto y el noveno año del niño se le hayan leído media docena de libros estándar de viajes bien elegidos; de esta manera, ha adquirido ideas distintas sobre los alrededores, el comercio y los modales de la gente de todas las grandes regiones del mundo; ha acumulado una reserva de conocimiento valioso y confiable que durará toda su vida; y además, ha hecho algo para adquirir el gusto por los libros y el hábito de leer.»
¿Y los mapas en esta primera etapa?
Aparte de las nociones rudimentarias sobre mapas descritas en la sección anterior:
«Los mapas deben ser utilizados con cuidado en este tipo de trabajos, –– un croquis de la jornada del viajero, para finalmente compararlo con un mapa completo de la región; y el maestro pedirá una descripción de tal ciudad o tal distrito marcado en el mapa, a modo de prueba y confirmación del conocimiento exacto del niño. De esta forma también obtiene nociones inteligentes de geografía física; en el transcurso de sus lecturas se encuentra con la descripción de un volcán, un glaciar, un cañón, un huracán; escucha todo, pregunta y aprende el cómo y el por qué de tales fenómenos en el momento en que despierta su interés.»
Así que, podrían resumirse los tres primeros años (Grupo I) así:
- Conceptos básicos de geografía física con el libro de apoyo «Geografía Elemental», durante los tres primeros años. (Temas desarrollados principalmente durante el tiempo al aire libre idealmente).
- El primer año además incluye literatura viviente referente a libros de historias de personajes de otras tierras, su cultura, sus formas de vida y en lo posible características geográficas de la región.
- En el segundo y tercer año se tiene en cuenta literatura viviente (crónicas de viajes, historias de pueblos o personajes de esos territorios) dirigida al estudio general del globo y de los continentes. Su geografía representativa. Apuntando al continente y país de residencia de los estudiantes, para dar paso en años siguientes al estudio detallado de la geografía de la propia nación.
Claramente esta es una sugerencia desde mi perspectiva, y que puede variar en cada familia, entre las variaciones quizás desees abordar algunas generalidades geográficas de tu país en los primeros años, y/o también hay libros que para abordar la geográfia física básica incluyen la geografía nacional y esta es una buena opción para combinar ambas finalidades.
Otras secuencias de temas y abordajes que puedes tener en cuenta, se encuentra en el currículo de Ambleside Online, que puedes mirar con detenimiento aqui [en inglés]
Una última actividad que solían llevar a acabo en las escuelas de Mason la describe la Srta. Smith:
«Una vez a la semana se da una lección sobre algún lugar interesante del que se habla en los periódicos o que han visitado los padres del niño. El niño aprende dónde está este lugar y cómo llegaría desde Gran Bretaña [o nuestro lugar de residencia]. Aprende el interés especial que se le atribuye y, con la ayuda de tarjetas postales y buenas descripciones [o uso sabio de las herramientas tecnológicas con las que contamos el día de hoy], es capaz de imaginar cómo es. Luego sigue un mapa esquemático que muestra dónde se encuentra, etc.»
Para finalizar me encantaría compartir un extracto de la Revista de los padres de 1899 escrito por la Srta. R. A. Pennethorne [3], quien considero sintetiza de una forma muy bella los principios detrás de las lecciones de geografía:
«Debemos enseñar a los niños lo que nosotros mismos necesitamos y por lo que nos preocupamos por saber acerca de las tierras extranjeras, leerles buenos libros de viajes y vincular los acontecimientos del día con sus vidas mediante lecciones sobre los lugares cuyos nombres están en boca de todos [conectar la geografía con eventos actuales]: Manila y Filipinas es más importante para el niño, que «el área del Imperio Alemán que está a miles de millas cuadradas». Los primeros comienzos de la geografía: sus cimientos se establecerán mucho antes de los días de clase, en casa, porque la geografía es esencialmente un tema que debe progresar hacia afuera desde el círculo de la experiencia del niño, comienza por aprender a conocer una colina, un río, un campo, un pueblo, y reproducirlos en arena o arcilla. Luego, en los primeros días de la instrucción definitiva, escucha sobre el mundo redondo y sus siete hermanas: los planetas; se entera de que una parte de la tierra es muy caliente y otra muy fría, se entera de que el sol no se va a la cama por la noche, que la tierra da vueltas, mientras que al mismo tiempo, su conocimiento de la superficie de la tierra se ha extendido a los alrededores de su hogar, su condado y su país. Luego pasará de la bandeja de arena al plano de su aula, en realidad medido por él mismo, tomando partes de pulgadas por pies para que sepa lo que significa «medir a escala». Luego aprende cómo se mide el globo terráqueo y cómo se hacen los mapas a escala, y luego está listo, mapa en mano, para explorar la tierra, mientras se sienta cómodamente en casa»
Y así doy por terminada esta primera parte. En los años siguientes correspondientes al grupo II en adelante desde el año 4, la asignatura de geografía se mantiene principalmente desde dos vertientes: trabajo a base del «uso de los mapas y preguntas asociadas», y por supuesto literatura viviente. ¡Nos vemos pronto!
Referencias:
- [1] The Parents’ Review, 1913, pp. 522-528 By Janet R. Smith
- [2]Geography using map questions. Dawn Tull
- [3] Parents’ Review. (1899). “P.N.E.U. Principles As Illustrated by Teaching. Srta. R. A. Pennethorne” p. 551.
- Volume 1: Home Education. Charlotte Mason.
- Archivos de Charlotte’s Daughters … learning from Charlotte Mason and the Parents’ National Educational Union
Ay qué práctica y útil es esta información, y qué crucial conocerla bien para empezar bien el estudio de la geografía, ¡gracias, amiga!
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Definitivamente un recurso valioso y sencillo para poner en práctica de manera fácil. Atenta a cada recomendacion para hacer mis propias investigaciones y aprender. La verdad desconozco mucho sobre este tema, pero debo reconocer que este post me anima a instruirme y deleitarme en ello. ¡Gracias Maria E
!
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Caro… me alegra que te motive, mi intención es brindarle las pautas para que su trabajo tenga norte y claridad… atenta a cualquier duda o sugerencia siempre. Un abrazo 🤗
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